La Laguna vice.

Leo que "El Ayuntamiento de La Laguna dará 20 días a Alcampo para cerrar la galería comercial de forma voluntaria y cumplir así la sentencia emitida por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) que declaraba nula la licencia comercial específica de la ampliación del edificio dada por silencio administrativo". canariasahora.com

Eso significa que, si esta vez el ahora Excmo. Sr. Alcalde Presidente, antes Concejal de Urbanismo, lo tiene a bien, tendrá que cerrar esa galería comercial que, a bote pronto, tiene en su interior tiendas como H&M, Springfield, Cortefiel, una perfumería, una tienda de ropa interior femenina y alguna que otra más. Comercios abiertos de 10 a 22, de lunes a sábado, con sus dos turnos de trabajo y, en consecuencia, con sus trabajadores. Un buen puñado. Teniendo en cuenta que esos comercios tienen varios centros de trabajo en la isla, con su también buen puñado de trabajadores para cubrir sus turnos de trabajo, y teniendo en cuenta que existe esta situación económico-político-social a la que denominan "crisis", es muy probable que gran parte de esos trabajadores terminen en sus puñeteras casas de aquí a un par de días.

Por un silogismo lógico, si accedieron a sus puestos de trabajo gracias a que el Ayuntamiento de La Laguna permitió construir y abrir esa prolongación del centro comercial sin las correspondientes licencias y de manera ilegal, lo que supuso que esos establecimientos se instalaran en la misma, el hecho de que el Tribunal Superior de Justicia considere que esa galería es ilegal y que, por tanto, debe ser no sólo cerrada, sino incluso derruida, el Ayuntamiento también será el responsable, principal y directo, del excelentísimo despido de esos trabajadores.

Pena de Estatuto de los Trabajadores y pena de Ley de Procedimiento Laboral. Porque por muy objetivo que pueda ser ese objetivo, por muy justificado en causas técnicas o productivas que éste y por mucha indemnización miserable que se les pague, dan ganas de montarle un pollo a mi Excmo. Ayuntamiento, con su Excmo. Alcalde y con sus muy nobles y de ilustre historia corruptelas.

Como diria nuestra amiga la Sarrautte, "muchas gracias, señor arcarde..."