jueves, 21 de octubre de 2010

Las laboralmente improductivas tardes de jueves de un padre "canguro".


Las tardes de los jueves es la semanalmente asignada para ejercer como "canguro" o cuidador de dos, en ocasiones, pequeños cabrones a los que hay que ir a buscar a guardería y colegio, desvestir, vestir, dar de merendar, entretener, vigilar y controlar para que la casa no se convierta en un dislate. Como soy de natural quejoso, ya vendrá la madre a decir que ella hace esa misma función lunes, martes y, próximamente, miércoles pero en mi descargo diré que yo no estoy en posesión de la santa paciencia de la que ella disfruta.

Hoy, no obstante, la tarde está transcurriendo por unos caminos de absoluta tranquilidad: el pequeño, resfriado, sólo hace dormir y emitir un llanto quejoso, aunque aún le han quedado fuerzas para darle al play de la minicadena y poner su música (si, él se autogestiona en ese sentido: conoce el funcionamiento del aparato y, cuando le apetece, no sólo lo enciende, no sólo pincha el botón play sino que, además, se defiende buscando la pista musical que más le gusta). Al mayor ha ido a buscarlo al colegio la abuela (que si sacas al pequeño, puede coger frío) y, nada más llegar, ha pedido la merienda, ha sacado la mesa y las sillas infantiles de Ikea y las ha colocado en medio del salón, donde se entretiene recortando un libro de colorear con las tijeras. Pokemon en la televisión, que discurre sin el más mínimo intereses por sus potenciales televidentes.

Yo no he podido hacer nad laboral. Eso si, al llegar, he podido hacer las camas, lavar la loza, llevar al pequeño a mear y a cagar al orinal dos veces, pasar la escoba, fregar la cocina y recoger el salón. No me dio tiempo al mediodía-casi hora del almuerzo de recoger nada en el despacho, ni siquiera de abrir el maletín y sacar las carpetas de los juicios de hoy, así que la tarde ha transcurrido de manera completa y absolutamente improductiva desde el punto de vista laboral. Supongo que ya he cumplido en el resto de la semana, con mis señalamientos, mis consultas, mis negociaciones ad futurum y las improvisaciones en juicios como el de esta misma mañana. Mañana volveré a mis ratios de productividad, así que por una tarde a la semana no pasa nada.

2 comentarios:

La.. dijo...

Me uno a tu " queja " , muchos dias simplemente quiero ESCAPAAARR de tanta responsabilidad !!
Ser padres es duro, ( pero maravilloso a la vez !
Un abrazo y fuera

Maria

eclair dijo...

joder tox