sábado, 29 de noviembre de 2008

La fila 2 del Auditorio.


Cuando conseguimos entradas para ver a Les Luthiers en una fila 2, junto al pasillo central, del Auditorio lo celebramos. Estaríamos cerca del escenario, con una magnífica vision y mejor acústica. Que el Auditorio de Calatrava es incómodo y poco funcional es público y notorio. Ya se han escrito cientos de páginas sobre ello. Las entradas al recinto son escasas, el hall es el mayor campo de pulmonías de la isla, apenas hay 3 o 4 puertas para llenar o desalojar la sala sinfónica y la separación entre filas de butacas es tan escasa que cada vez que alguien quiere entrar o salir de su localidad debe levantar a toda la bancada.

Pero ese no es el único mal del Auditorio de los 7.000 millones de pesetas. La fila 2 de la sala sinfónica, la que estaba cerca del escenario, la de la buena acústica, es una auténtica mierda. Algún cabeza (mal)pensante tuvo la genial idea de llenar la sala de filas de bancos para aprovechar los espacios, sin darse cuenta que las 2 primeras filas no están escalonadas en altura. Esto es, mientras que las tropecientas filas restantes están escalonadas, de modo que el que se siente detrás no sufra la cabeza o la melena de quien le sucede delante, eso no ocurre en la fila 2, que está a la misma altura que la primera fila. De este modo, o se sienta una pareja de pigmeos delante, o es prácticamente imposible ver nada de lo que ocurre apenas 10 metros delante.

Nada más sentarnos, y tras levantarnos unas 25 veces en 10 minutos, me di cuenta de la situación, aunque nos engañábamos a nosotros mismos: vendrá alguien bajito.... Los cojones. Al rato aparece la pareja fashion-victim de turno y se nos coloca delante. Él, con melena engominada; ella con melena rubia. Para ver algo, había que alongarse sobre el brazo derecho, dejando medio cuerpo dentro del pasillo central, o intentar ver algo en el espacio restante entre sus cabezas. Eso si, ésta última opción, sólo cuando la pareja de tortolitos pijos santacruceros no juntaban las cabecitas riendo las gracias de los intérpretes o contándose confidencias. Y a todas éstas, todas las entradas vendidas.

Las 2 primeras piezas aguantamos en dicha situación hasta que, oh milagro, los asientos de la fila inmediatamente superior, esta sí en altura, se encuentran vacías. ¿Todo el papel vendido y 2 asientos vacíos? Gracias, amigos incomparecientes, por hacer posible la salvación del espectáculo. Aprovechando el apagón de luz entre acto y acto, dimos un salto mortal hacía atrás y nos cambiamos de localidad con todo el morro. Y ahora que vengan a echarnos, pensé.

A partir de ahi pudimos disfrutar del espectáculo de Les Luthiers, perfecto, milimétrico, virtuoso, genial e hilarante como siempre. Esta misma obra ya la habiamos visto en Madrid en Mayo del pasado año, pero una obra de Les Luthiers no pierde frescura e ingenio aunque se vea mil veces. Carcajadas y aplausos para acabar un jueves.

Eso si, recuerden, ni se les ocurra comprarse una fila 2.

lunes, 24 de noviembre de 2008

El Euribor.


Para los que tenemos hipoteca y, además, la tenemos a tipo variable, la palabra Euribor se ha convertido de un tiempo a esta parte en la peor de las pesadillas. Yo creo que tenemos una hipoteca bastante buena (euribor + 0,60), visto lo visto las condiciones que se están dando por esos bancos del señor últimamente. Y cuando el tipo es variable, las fechas próximas ala revisión anual se tornan intranquilas: ¿subirá la cuota? ¿cuánto? ¿te acuerdas cuando pagabamos X menos que ahora?

A todos los obsesos, como yo, del Euribor les recomiendo un blog: www.euribor.com.es , donde se explica de manera muy didáctica, y con gracia, loas vaivénes de nuestro amigo porcentual y de la tormentosa económica mundial. Lectura recomendable, tengas o no hipoteca.

jueves, 20 de noviembre de 2008

La cayetanada, la cayetanesca y los cayetaníes.



Coincido en mucho con el último post del blog de José María Lizundia, donde destripa lo que se ha terminado por llamar "Cayetanada". La "cayetanada" es, para quien no lo sepa, la fiesta de apertura del año judicial de la jurisdicción social de Tenerife, una excusa para comer, beber, reir y bailar todo juntos, sin distinción (aparente) de rangos o escalas jerárquicas. En mis primeros años de laboralismo escuchaba hablar cada octubre o noviembre de la susodicha fiesta, si bien o no me enteraba bien, o no era digno de que me enterase de ella. Fue una fiesta, no de apertura del año judicial, sino otra celebrada por otro motivo, un caluroso mes de mayo, cuando asistí a la primera.

A mi me gusta. Que se ha institucionalizado, es cierto. Que no tiene la espontaneidad que antaño debía tener, pues debe serlo también. Que en las "cayetanadas" nada, absolutamente, queda al azar, también. Pero a mi me sigue gustando. Y me gusta ir para observar, ya que a mi el precio de la barra libre me queda anchísimo por desaprovechado.

Las "cayetanadas" siempre tiene el mismo guión, que todos nos sabemos de memoria:

Primero, va llegando el grueso de la "cayetanesca" (dígase la masa asistente al evento); aquellos que llegan en sus coches particulares o que comparten vehículo una tarde de viernes en la que siempre, siempre, hay mega atasco en la autopista del norte. Las primeras hordas de "cayetaníes" (el individuo) van directas al grifo de Cruzcampo, porque el lugar, como buena bodega de ambiente rociero, tiene su grifo de cerveza para refrescar gaznates vociferantes ahora, roncos más tarde. Cervezas, manises, aceitunas y fuet. Primera estación completada.

Algo más tarde, viene la guagua con el resto de la cayetanesca, aquella que viene directamente del Palacio de Injusticias. Mismo ritual, algunos flashes. Más abrazos y algunos puñales.

Segundo acto: se conforman las mesas. 2 mesas largas (una al fondo, otra según se entra a la izquierda), una serie de mesas pequeñas redondas entre las otras dos, otra mesa al aire libre (si el tiempo lo permite)y los barriles del interior. La configuración de la mesa apenas varía año tras año: los mismos culos en los mismos asientos, las mismas camarillas. Los jóvenes tienden a buscarse entre si, salvo contadas excepciones.

Tercer acto: fila india, plato en mano, para degustar cochinillo, acompañado de pimientos asados y compota de manzana.

Cuarto acto: Tras la comida, el café y siempre los mismos (y deliciosos) dulces; el hijo del anfitrión toma los mandos de la mesa de sonido para pinchar música, primero más o menos actual, luego los clásicos españoles de los 60 que tanto le gusta al sector "ye ye". El mismo baile, los mismos giros, el mismo humo de puro y los mismos vasos de tubo. Barra a tope. Camisas empapadas en sudor. De ahí, hasta que el cuerpo aguante o hasta que llegue la guagua de vuelta, normalmente de madrugada.

Todo está planificado sin querer (aparentemente) estar planificado. Hasta los presuntos desfases no son tales, porque siempre son los mismos, perfectamente medidos. Un acto institucional más que un acto de exaltación del compañerismo. Tiene, en el fondo, un punto (o un mucho) de conservador y de cierta hipocresia social: nada de fotos, nada de testimonios....¿Pero no estamos entre amigos que se quieren, se abrazan y se divierten? Un año, por un quítame allá esas fotos, casi me matan. Desde entonces, que las pilas del flash las pague otro.

Pero, repito, a mi me gusta. Y este año iremos, que el año pasado no tocaba.


El foro de Togas y Letras.


Aunque Lizundia dice que no lee este blog, le voy a hacer un regalo y espero que alguien se lo haga llegar. Navengando, navegando, me he encontrado con el antiguo foro (bueno, el único que hubo) de la extinta web TOGAS Y LETRAS, foro aún vivo por hora y gracia de algún escritor con tiempo libre, independentista, ecologista y presuntamente antisistema. Para los nostáligos, no se pierdan el contenido del foro de las páginas 12 en adelante.

http://boards4.melodysoft.com/app?ID=togasyletras

sábado, 15 de noviembre de 2008

El espíritu de Juanito.

Hoy, leyendo el blog NOTAS DE FÚTBOL (http://www.notasdefutbol.com/), que recomiendo encarecidamente a los futboleros, me encontré con un reportaje sobre Juan Gómez "Juanito", que hubiese cumplido años el pasado 10 de noviembre de no haberle sesgado la vida una carretera camino a Mérida. No era Juanito un jugador al que le tuviera aprecio cuando jugaba (aunque tampoco lo recuerdo muchisimo), primero por madridista, segundo por su fama de follonero.

Habla el reportaje sobre el "Espíritu de Juanito", ese exceso de testiculina con el que el fútbol español se movía en los 80 para afrontar partidos difíciles, tanto domésticos, como internacionales. Y ese espíritu se materializa en un "decálogo" que, bien pensado, podría llevarse al ámbito de la práctica jurídica sin escrúpulos.

Hagámos un esfuerzo y volquemos este "decálogo" a un juicio:

1.- En el autocar de vuelta, hace quince días -así se jugaba la Copa de Europa-, ya había que ir hablando de machacar al contrario.

2.- Durante la semana, recordar que se va a lograr. Camacho lo escribía en la pizarra cada día.

3.- Intimidar al rival en el mismo túnel a través de miradas penetrantes y gestos desafiantes. (Como os imagináis, no lo cuenta todo).

4.- En el sorteo con el árbitro, pedir el saque inicial. El rival no debe "tocarla" ni al principio.

5.- La primera jugada tiene que acabar en la línea de fondo o arrancar un grito desde la gradas.

6.- Hacer la primera falta del partido. Si es dura e intimida al contrario, mejor.

7.- Hacer el primer disparo. No importa que vaya fuera si hace ruido cuando choca con la valla publicitaria.

8.- Acortar el descanso y volver al campo antes de que lo diga el árbitro. Siempre metiendo prisas.

9.- Trazar una línea imaginaria en campo propio y procurar que de ahí no pase el rival.

10.- Actuar al máximo de revoluciones y contagiar al público con ello.

lunes, 10 de noviembre de 2008

El alquiler del nuevo Palacio.

La jurisdicción social siempre ha sido el patito feo de la Justicia en Canarias. Afortunadamente, yo soy lo suficientemente joven como para no haber sufrido la diáspora de juzgados de antaño, cuando se repartían por diferentes lugares de Santa Cruz. Sin embargo, desde la creación del Social número 6, así como el nombramiento de juzgados de refuerzos, la descentralización de la jurisdicción se ha vuelto a hacer en parte patente.

La solución encontrada por la Consejería del Gobierno de Canarias competente en la materia es el traslado de los 6 juzgados (y del 7º, para cuando haya dinero) al local comercial que hasta hace unos días se encontraba una tienda Orly, en la Avenida 3 de Mayo. Algunos andan desde hace meses con los presuntos planos del local en su maletín.

Hoy me he topado con una noticia al respecto, de la que extracto la parte que nos interesa:

Las mayores rentas por alquiler de inmuebles de la Administración de Justicia en Canarias se sitúan en Las Palmas de Gran Canaria y en Santa Cruz de Tenerife. En la capital grancanaria, el mayor montante anual, de 738.044, 28 euros, responde al alquiler del edificio donde se ubican varios juzgados en el colegio de los jesuitas, propiedad de la Fundación Loyola.

En Santa Cruz de Tenerife, una cantidad ligeramente superior, de 763.594, 80 euros, recae en el alquiler del inmueble de la Jurisdicción Social, mientras que las oficinas de la Jurisdicción Contencioso Administrativa supondrán un coste en 2009 de 423.845, 28 euros.

http://www.canariasahora.es/noticia/49457/

763.594,90 euros anuales. 63632,90 euros mensuales en concepto de alquiler. 10.600.000 pesetas mensuales. Una pasta multiplicada por los años que nos quedemos ahí (que sea por los siglos de los siglos)

Para un local en el que, parece, la luz natural sólo va a dar por el ventanal que da a la Avenida; que, parece, no tiene ventilación natural, no está mal. Chiquito negocio. Luego me dicen que parezco hindú. Ya me gustaría, aunque fuera sólo por la pasta.

jueves, 6 de noviembre de 2008

Analfabetos funcionales

Pleno del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife. 4 de noviembre de 2008. La oposición interpela al grupo de gobierno sobre el número de locales cedidos por la Corporación a ONG's. La respuesta es competencia (es un decir) de la concejal del ramo, una tal Esther Sarrautte, que se ha ganado el premio a la idiota (no es un insulto, es un diagnóstico psiquiátrico) del mes. La susodicha viene a responder, con su voz de pito fañoso, que por ONG no le viene nada, que si le preguntan por la Cruz Roja, por la Asociación San Miguel y demás, pues si. Miradas incrédulas desde su misma bancada y runrun en toda la sala. Aquí les dejo el video. Suban los altavoces y átense las manos a la silla para no evitar las ganas de coger el coche, aparcar cerca de la Casa de los Dragos y meterle dos cogotazos a la individua.



Aquí la foto, por si la ven por la calle

Y luego sale el Alcalde ("arcarde", según la grafía del vídeo) diciendo que es una "concanetación" de errores y le echa la culpa al funcionario de turno, el pobre indefenso de este lance que sería cómico si no fuera porque a esta banda de analfabetos funcionales se les paga sus salarios con los impuestos municipales.

Pero, ¿en qué manos estamos?

martes, 4 de noviembre de 2008

Obama me la refanflinfla.




Pero de verdad. Mucho. Y McCain también. Desde hace muchos meses nos bombardean insistentemente por tierra, mar y aire con las elecciones usamericanas como si en ellas nos fuera la vida. Hasta vergüenza ajena he sentido escuchar a periodistas y políticos canarios, de esta cagada de mosca en medio del océano, opinando de manera sesuda sobre el proceso electoral, sobre las primarias, los caucus, los votos electorales, las papeletas mariposas y demás chorradas.

A mi todo ese proceso me resbala. Si gana Obama (que ganará) me dará lo mismo, igual que si lo hace el otro señor, un viejales para sopitas y vino, que se presenta. Me repatea la politica americana, el culto al debate estético (donde es más importante el color de la corbata que el contenido), las perfectas familias de los candidatos puestas en el escaparate y las heróicas historias de dos multimillonarios que quieren jugar a ser los amos del mundo.

Mañana y pasado las bolsas de todo el mundo subirán y, con ello, los ricos se harán más ricos. Pero el paro en España no bajará de repente, ni bajará el déficit, ni subirá la productividad, ni se mejorarán los Convenios Colectivos, ni las pensiones no contributivas pasaran de los 350 euros, ni los sindicatos se echarán a la calle porque las cosas no van bien.

Llámenme frívolo, inculto o botijo verde: me preocupa más que al Atleti le hayan robado el partido en Liverpool que quien va a manejar el cotarro yanqui durante cuatro años.

Si un oligofrénico alcohólico ha llegado a ser presidente de ese país, cualquiera puede serlo. Que tampoco se ponga ninguna medalla el ganador.